En el noveno día de la Novena a Santa Teresa de Calcuta veremos el llamado a la santidad a través del servicio a los más pobres.
Ayudar a los más necesitados nos acerca a la santidad, porque no sólo mejoraremos la vida de quienes ayudamos, sino que estaremos sirviendo a Jesús, dándole amor, el amor más profundo que tenemos, porque la caridad saca lo mejor de nosotros.
Día 9 de la Novena a Santa Teresa de Calcuta
«Jesús es mi todo en todo»
En el noveno día nos enfocamos a la llamada a la santidad, conociendo y sirviendo a Jesús en los más pobres de entre los pobres.
La santidad es Jesús viviendo y actuando en mí. “Nuestras obras de caridad no son otra cosa que el rebosar de nuestro amor por Dios que surge de nuestro interior. Por lo tanto, aquel que está más unido a Él ama más a su prójimo”.
“Nuestra actividad es verdaderamente apostólica sólo en la medida en que permitimos que Él actúe en y por medio de nosotros – con Su poder, con Su deseo, con Su amor. Debemos ser santos, no porque queremos sentirnos santos, sino porque Cristo debe ser capaz de vivir Su vida plenamente en nosotros”.
“Consumámonos con Él y por Él. Déjale ver con tus ojos, hablar con tu lengua, trabajar con tus manos, caminar con tus pies, pensar con tu cabeza y amar con tu corazón. ¿No es esto la unión perfecta, una continua oración amorosa? Dios es nuestro Padre amoroso. Permite que tu luz de amor brille tanto ante los hombres que al ver tus buenas obras (lavar, barrer, cocinar, amar a tu marido y a tus hijos) puedan glorificar al Padre”.
“Sé santo. La santidad es el camino más fácil para saciar la sed de Jesús, la Suya por ti y la tuya por Él”.
Pensamiento del día:
“La caridad hacia los demás es el camino más seguro para una gran santidad”. Pide la gracia de ser santo
Irradiando a Cristo.
Querido Jesús, ayúdame a esparcir tu fragancia por donde quiera que vaya. Inunda mi alma con tu espíritu y vida.
Penetra y posee todo mi ser tan completamente que mi vida solo sea un resplandor de la tuya. Brilla a través de mí, y permanece tanto en mí que cada alma con la que tenga contacto, pueda sentir tu presencia en mi alma.
Permite que ellos al mirarme, no me vean a mí sino solamente vean a Jesús. Quédate conmigo y entonces podré comenzar a brillar como Tú brillas; a brillar tanto que pueda ser una luz para los demás.
La luz, oh Jesús, vendrá toda de Ti; nada de ella será mía; serás Tú quien brille sobre los demás a través de mí. Permíteme así alabarte de la manera que tú más amas, brillando sobre aquellos que me rodean.
Permíteme predicarte sin predicar, no con palabras sino con mi ejemplo, con la fuerza que atrapa, con la influencia compasiva de lo que hago, con la evidente plenitud del amor que mi corazón siente por ti. Amén.
Podcast de la oración:
Video de la oración:
La Madre Teresa o Santa Teresa de Calcuta nos ha invitado toda su vida a ayudar a los más pobres y necesitados, porque sabe que allí encontraremos al Hijo de Dios. Actuar así nos ayuda a alcanzar la santidad y acercarnos al Cielo. Esta labor de caridad fue tomada por la Santa Teresa como una misión encomendada por Jesús, a quién amo plenamente, y ese era el amor que compartía con su prójimo.
La novena voladora, fue conocida gracias a la Madre Teresa, quien creo esta oración para pedir ayuda al Cielo por algún favor, y aunque a veces no podía hacer una novena como tal por falta de tiempo, no quería dejar de conversar con Dios. Esta novena voladora o novena expres está dividida en 10 memorares, de las cuales las primeras 9 son para pedir por el favor que aqueja, y la décima es para agradecer por la gracia entregada, pues ella estaba convencida que, si el Santo Padre lo veía conveniente, se lo iba a dar en el momento justo.
Si quieres conocer más sobre la novena de Santa Teresa de Calcuta, entonces no te pierdas este artículo.
Te invitamos a nuestra sección de oraciones para conocer más sobre las diferentes formas de conversar con Dios.