Una familia se encuentra en misa y se acerca el momento de la consagración cuando se escucha un sonoro grito. «Se ha vuelto a caer del banco«, piensa el padre. Las miradas de los fieles se vuelven hacia la familia, pacientes con quien por enésima vez trata de mantener a sus hijos en un imposible estado de perfección adulta. Finalmente, uno de los progenitores toma la decisión, se levanta y saca al pequeño de la Iglesia, aunque el resto de fieles le anima a quedarse. Los padres, ahora divididos, podrían tener que enfrentar lo que queda de misa tratando de mantener el control de unos hijos que exigen apremiantemente salir y disfrutar, como su hermano, de una brisa de aire fresco o simplemente de jugar entre ellos.
La descrita no es una situación anómala. Muchas familias acuden hasta con miedo a misa, dando incluso por imposible la idea de rezar unos minutos, aún a sabiendas…
Autor: José María Carrera
Los 12 pasos que nos llevan a la esclavitud del orgullo, según San Bernardo
El orgullo es un pecado que puede manifestarse de diversas formas y llevarnos por un camino de autodestrucción espiritual. Continúa leyendo este artñiculo para conocer cuales son los pasos que…
Hábitos del Padre Pío que todos los católicos podemos practicar
San Pío de Pietrelcina, más conocido como el Padre Pío, nos deja unos cuantos hábitos espirituales que necesitamos conocer para tener una vida más cercana a Dios. Continúa leyendo este…
Las 35 apariciones de la Virgen María
Descubre aquí las apariciones y el mensaje de las 35 apariencias de la Virgen Maria que la Iglesia Católica reconoce. Nuestra madre María se hace presente en cada rincón del…