La Ley ordenaba a los matrimonios más pobres ofrecer al menos “un par de tórtolas o de dos pichones” (Lc 2,24) como sacrificio al Señor.
Redacción (04/02/2025 09:12, Gaudium Press) Con ocasión de la fiesta de la Presentación del Niño Jesús en el Templo y de la Purificación de María, los comentaristas tejen hermosas consideraciones sobre ese acontecimiento, analizando sus más diversos aspectos, pero en esta nota sólo nos centraremos en un detalle lleno de significado.
La Ley ordenaba a los matrimonios más pobres ofrecer al menos “un par de tórtolas o dos pichones de paloma” (Lc 2,24) como sacrificio al Señor. Y no es casualidad que se prescribieran estas dos aves.
San Cirilo explica que la tórtola es la más locuaz de ellas y la paloma la más mansa. Nuestro Señor quiso simbolizar de esta manera que practicaría la más perfecta mansedumbre en esta tierra y…
Autor: Saul Castilblanco Mosos
Los 18 beneficios de asistir a la Santa Misa
La misa es el encuentro con Dios Nuestro Señor, pero no sólo con Él, también con nuestro interior, haciendo que mejoremos cada día más como personas. Este encuentro con Nuestro…
Jacinta Marto, la pastorcita que nos enseña el valor del sacrificio
El 20 de febrero se cumplió el centésimo aniversario de la muerte de Santa Jacinta Marto, la pastorcilla de Fátima fallecida en Lisboa con sólo diez años. Todos conocemos la …
Hábitos del Padre Pío que todos los católicos podemos practicar
San Pío de Pietrelcina, más conocido como el Padre Pío, nos deja unos cuantos hábitos espirituales que necesitamos conocer para tener una vida más cercana a Dios. Continúa leyendo este…