Los domingos, en las iglesias católicas de Estados Unidos, Inglaterra y el mundo desarrollado, hay un mayor número de mujeres que de hombres. (Ver aquí la evolución de las cifras en Estados Unidos a lo largo del tiempo y aquí un estudio a nivel mundial.)
Este fenómeno mereció en 1988 una mención del Papa San Juan Pablo II en la exhortación postsinodal Christifideles laici: “Diversas situaciones eclesiales tienen que lamentar la ausencia o escasísima presencia de los hombres” (n. 52). Pese a ello, se habla mucho más de que las mujeres abandonan la Iglesia y preocupan sobre todo las enseñanzas y prácticas litúrgicas que podrían desanimarlas.
Nadie podría reprocharle a los hombres católicos si sacaran la impresión de que ni la jerarquía de la Iglesia ni sus creadores de opinión consideran de gran importancia el que hayan dejado de ir a misa. Y hay voces que…
Autor: Joseph Shaw
Misericordia de Dios: Nunca se cansa de perdonarnos
La misericordia de Dios se manifiesta de diversas formas, ya sea a través del apoyo y la consolación de otras personas, del sacramento de la confesión que nos permite liberarnos…
Consejos para una llevar una vida Cristiana
Llevar una vida Cristiana que agrade a Nuestro Creador y a Nuestra Madre, no es difícil, y menos aburrida, como muchos pueden creer. Sin embargo, necesita dedicación. No basta con…
La cultura es el camino de la Nueva Evangelización
El objetivo del Papa San Juan Pablo II de involucrar a la cultura en la Nueva Evangelización fue la construcción de una civilización del amor como fuente de libertad y…