I am Patrick, es un docudrama sobre San Patricio. La película fue dirigida y escrita por Jarrod Anderson, con el objetivo de dejar claro el sentido cristiano del personaje y despojarle de algunas leyendas que no tratan en realidad de la fe. San Patricio era ciudadano romano en Britania, un adolescente de familia rica, secuestrado a los 16 años, esclavizado por piratas irlandeses. Aprendió a vivir como un esclavo, en pobreza, como pastor, durante 6 años.
El director se ha documentado muy bien sobre la época del santo, el hundimiento de la Britania romana en siglo V, junto a los historiadores Charles Doherty, Elva Johnson y los escritores Thomas O’Loughlin y el sacerdote Billy Swan.
El Patricio que ve el espectador es un hombre que ha sufrido, ha crecido y se ha volcado como misionero en un pueblo muy alejado de la fe. Seán T. Ó Meallaigh interpreta al joven Patricio, y al santo ya mayor lo interpreta John Rhys-Davies
“Este hombre extraordinario toma una de las partes del mundo más primitivas, salvajes, brutales, paganas, con sacrificios humanos, y en un par de siglos, literalmente debido a él y a la cristianización de Irlanda, el país se convierte en la Atenas del norte, de una forma extraña, en el extremo del mundo civilizado, en la época que llamamos, neciamente, las Eras Oscuras. Es una de las grandes luces de aprendizaje y erudición”, proclama el actor.
Durante el rodaje, Rhys-Davies hubo algo que le hacía pensar, puesto que para escribir con pluma y tinta hay que pararse cada pocos segundos a mojar la tinta. “No tenían nuestra habilidad de simplemente borbotear palabras, como hacemos; tenían que pensar”, señala.
“Vivía en una colina desnuda, con apenas unas ropas de pieles para mantenerse medio helado. Es un gigante. Su cristianismo es práctico en las circunstancias más duras y terribles. Lo suyo no son unos minutos de glamur, es toda una vida: de un origen privilegiado, ser secuestrado, maltratado como esclavo, tanto como un hombre puede sufrirlo, y reencontrando su fe, escapando… y con esa necesidad de volver con sus captores para convertirles y perdonarles. Es un gigante”.
La isla del Purgatorio de San Patricio
Esta isla es un lugar de peregrinaje que ha permanecido por muchos siglos. Donde la oración, la conversión y la reparación de los pecados es el eje fundamental de aquellos cristianos que quieren visitar la Isla. A pesar de las frías y heladas noches, el hambre y los mosquitos, las personas dicen salir de allí completamente rejuvenecidos. Sólo los muy devotos y valientes, realizan la peregrinación por cuenta propia. La gran mayoría de los que lo hacen, vuelven a regresar.
Se llega a través de una embarcación, con lo cual antes de tocar tierra, deben quitarse los zapatos y estar descalzos mientras dure toda su estancia. Este peregrinaje dura 3 días, en las cuales el ayuno es muy riguroso. Por lo tanto, no se recomienda ni para ancianos o personas enfermas. Incluso se promociona a esta peregrinación como el más duro de toda Europa y el mundo cristiano.
Admisión
Se debe estar libre de enfermedades que les impidan realizar el ayuno. Asimismo se recomienda llevar prendas de abrigo y de lluvia. Además no está permitido.
- Ningún tipo de comidas, ni de dulces, ni chicles.
- Ningún tipo de bebidas, alcohólica o no alcohólica.
- Cámaras fotográficas, teléfonos celulares, radios, walkman.
- Instrumentos o juegos musicales.
- Artículos y literatura para leer o distribuir.
El ayuno.
- El ayuno comienza a las 0:00 hs. (medianoche 12:00 am) del primer día y finaliza a las 12:00 hs. del tercer día.
- Completo ayuno de comida y de bebida debe ser observado durante tres días.
- En caso de necesidad y pidiendo la debida solicitud, puede solicitarse una vez al día una taza de te o café y un pedazo de pan seco.
- Agua y medicaciones prescriptas bajo receta son permitidas en todo momento.
Ejercicios de peregrinación.
- Nueve estaciones deben completarse durante los tres días.
- Los peregrinos realizan de la estación 4 a la 7 juntos en la Basílica.
- Los peregrinos deben reunirse en la Basílica para la Liturgia y para la oración cuando suena la campana.
La Vigilia.
La Vigilia comienza desde las 10:00 pm del primer día hasta las 10:00 pm del segundo día
Este es el ejercicio central de penitencia de todo peregrino y requiere que cada peregrino este completamente despierto y de pie durante al menos 24 horas.
Fuentes: Religión en Libertad, Píldoras de Fe.
