Por Francis X. Maier
Los libros pequeños pueden contener grandes ideas. Ideas simples pero importantes. Un ejemplo obvio, publicado por primera vez en edición de tapa dura en 1948 con apenas 190 páginas, es Ideas Have Consequences, de Richard Weaver. Es una pequeña obra de genio. El título lo dice todo. Pero, para que quede claro: las malas ideas que suenan bien –como supermercados de propiedad estatal; no es que alguien racional sugiera tal cosa– pueden tener resultados infelices. Como Weaver sabía de primera mano, por haberlo vivido, el siglo XX estuvo plagado de grandes ideas, sus consecuencias y, demasiadas veces, sus víctimas. Considérese las bendiciones de Lenin y Pol Pot.
Un libro pequeño similar, publicado exactamente 60 años después, es especialmente oportuno hoy. In the Shadow of Progress (2008), de Eric Cohen, es un volumen delgado, fácilmente pasado por…
Autor: The Catholic Thing
¿Cómo rezar cuándo nos abruma las preocupaciones?
Las emociones que acompañan a las crisis son a menudo descritas como una sensación similar a olas gigantes rompiendo tú alrededor. Por eso, en sus Ejercicios Espirituales, San Ignacio de Loyola proporcionaba el…
Informe anual Planned Parenthood USA 2020, indica que asesinó a 383.000 bebés en abortos
Lo llamemos como lo llamemos es un asesinato, un asesinato del que luego se aprovecha todo, sangre, vísceras etc. para diversas industrias. No, nos podemos quejar los humanos del siglo…
Misericordia de Dios: Nunca se cansa de perdonarnos
La misericordia de Dios se manifiesta de diversas formas, ya sea a través del apoyo y la consolación de otras personas, del sacramento de la confesión que nos permite liberarnos…