Autor: Carlos Esteban
En la nómina de nuevos cardenales recién anunciada por Roma destaca un caso curioso: el del obispo nigeriano Peter Okpaleke, de quien Francisco aceptó la renuncia a principios de 2018 como obispo de Ahiara. Es el blog Secretum Meum Mihi el que nos alerta del caso.
Okpaleke protagonizó en su día un considerable revuelo, una de esas insólitas situaciones en las que el Papa Francisco se vio forzado a actuar contra su decisión inicial. Ahora ha sido ‘compensado’, si podemos decirlo así, con un capelo cardenalicio.
Fue Benedicto XVI, todavía reinante, quien le nombró en 2012 obispo de Ahiara, en el sur. Pero había un problema: Okpaleke no pertenecía a la etnia mayoritaria en su nueva diócesis, los mbaise, que rechazaron al prelado porque “no es de aquí”. Eso, naturalmente, incluía a los sacerdotes, que llegaron a bloquear el acceso del nuevo ordinario a la catedral…