Autor: José María Carrera
Con 18 años, Debbie Capen quedó embarazada. Su caso es representativo de cómo una joven, sin estar a favor del aborto, acudió convencida de que era la única opción. Treinta años después, Capen no solo es un auténtico bastión contra el aborto, sino también una muestra de lucha incansable para derrumbar los grandes mitos que sus partidarios difunden en todo el mundo. «De haber tenido un salvavidas», explica arrepentida a Charlotte Observer, su vida sería otra: hoy, se dedica por entero a salvar a miles de familias y niños.
Cuando Debbie supo que esperaba un hijo en 1992, era una joven estudiante universitaria de segundo curso en Charlotte (Estados Unidos).
«No tenía planes para casarme con mi novio y mi madre, viuda, vivía estresada solo para poder pagarme la universidad. Nunca olvidaré el miedo que sentí, simplemente no podía imaginar cómo criar un niño en ese momento»,…