Autor: redaccioninfovaticana
El Antiguo Testamento es la historia de la Alianza entre Dios y el pueblo de Israel. Es una historia de traiciones, avisos, castigos, arrepentimientos y reconciliaciones.
Cuando el pueblo de la Alianza se olvida de ella y la traiciona, Dios les avisa por medio de los profetas y les insta a arrepentirse y volver a Él; si el pueblo no hace caso a los avisos y se mantiene en su traición, sobrevienen los castigos, proporcionales a la traición cometida. El castigo produce el arrepentimiento, y con él la reconciliación.
Este ciclo se repite una y otra vez. Cuando el pueblo, tras la salida de Egipto, olvida a Dios y regresa a los ídolos, adorando el becerro de oro, sólo la intercesión de Moisés salva al pueblo del exterminio total, y el castigo se reduce -gracias a esa intercesión- a la muerte de 3000 hombres. La falta de confianza en el Dios que, a pesar de ella, proporciona al…