Autor: José María Carrera
Junio, mes del Sagrado Corazón de Jesús, no solo se ha convertido en una mancha sobre esta festividad y la fe cristiana de millones de españoles, sino también sobre la misma legalidad: decenas de ayuntamientos y administraciones públicas han decidido celebrar el supuesto «Orgullo gay» colocando banderas LGBT -o medidas sucedáneas-, aún a pesar de que esto haya sido definido como actuación ilegal.
Así lo declaró la oficina de prensa del Tribunal Supremo el 1 de junio de 2020, al fijar como doctrina «que no resulta compatible con el marco constitucional y legal vigente, y en particular, con el deber de objetividad y neutralidad de las Administraciones Públicas la utilización, incluso ocasional, de banderas no oficiales en el exterior de los edificios y espacios públicos, aun cuando las mismas no sustituyan, sino que concurran, con la bandera de España y las demás legal o…