Hay heridas que el tiempo no cura. Enterrar a un hijo es una de ellas. Quienes hemos pasado por esa experiencia sabemos que no hay consuelo posible, en mi caso la fe: se puede aprender a vivir con la ausencia, pero nunca se logra borrar el vacío. Las fechas que vuelven, los sueños que se quedaron sin cumplir, los objetos que permanecen… todo habla de lo que pudo ser y no fue.
Autor: Matilde Latorre de Silva
Articulo Juan Manuel de Prada ‘Un Poco de Paciencia’
Terminábamos nuestro artículo anterior con una observación muy atinada de Concepción Arenal, que nos alertaba sobre los males más pavorosos, que no son los que «las leyes condenan y la…
Ex ateos que comprobaron que Dios, tiene un plan perfecto para cada uno de nosotros
Muchas veces Dios espera y actúa sobre nosotros a través de terceras personas o sucesos que pueden parecer muy sencillos y no llaman nuestra atención. Y en realidad, su plan…
Descúbre las apariciones de la Virgen de Medjugorje: Te llevamos hasta ella
La Santísima Virgen María es la persona más importante de toda la creación, y es hora de que reconozcamos su amor. Las apariciones de la Virgen de Medjugorje han sido atacadas durante muchos años por aquellos que se niegan a creer en Ella…seguir leyendo