(R.R. Reno/First Things)–Mientras que Benedicto fue innovador, Francisco supone un retroceso. En 1870, en el Concilio Vaticano I, el Papa Pío IX consiguió la aprobación de la Pastor Aeternus, que definía la doctrina de la primacía papal y la infalibilidad pontificia.
Esta solemne ocasión inauguró una serie de pontificados imperiales que concentraron el poder en Roma. Se promovía a los aliados y se censuraba a los disidentes. Este estilo centralizador y autoritario de gobierno fue revocado por el Vaticano II, que puso un renovado énfasis en la colegialidad episcopal. Sus tumultuosas consecuencias contribuyeron en gran medida a debilitar el poder pontificio. Sin embargo, el ultramontanismo y la autocracia papal volvieron con la elección de Jorge Mario Bergoglio, S.J. El Vaticano actual tiene más en común con la época de Pío XII que con la de Juan Pablo II.
La Iglesia…
Autor: redaccioninfovaticana
Continuar leyendo en: infovaticana.com
La cultura es el camino de la Nueva Evangelización
El objetivo del Papa San Juan Pablo II de involucrar a la cultura en la Nueva Evangelización fue la construcción de una civilización del amor como fuente de libertad y…
Articulo Juan Manuel de Prada ‘Un Poco de Paciencia’
Terminábamos nuestro artículo anterior con una observación muy atinada de Concepción Arenal, que nos alertaba sobre los males más pavorosos, que no son los que «las leyes condenan y la…
¿Cómo ayudar a las Almas de tu familia en el Purgatorio a llegar al Cielo?
“No basta ser santo ante los hombres, sino que hay que serlo delante de Dios. ¡Recen por mí!”. Palabras impactantes del Monseñor Marengo, Obispo de Carrara, a una religiosa de María Auxiliadora…