«Viajar es una brutalidad. Te obliga a confiar en extraños, a perder de vista lo que te resulta familiar. Estás todo el tiempo en desequilibrio. Nada es tuyo excepto lo esencial: el aire, el descanso, los sueños, el mar, el cielo y todas aquellas cosas que tienden hacia lo eterno… o hacia lo que imaginamos como tal», escribió Cesare Pavese.
Dos mil años antes de Cristo, en una localidad de Mesopotamia llamada Ur; un hombre ya maduro, con luenga barba de patriarca, se entretiene dando de beber a su rebaño. El sol aprieta sobremanera, mientras su mujer recibe en el interior de una tienda la visita de unos primos lejanos. Las ovejas retozan alegres y levantan una cortinilla de polvo, que la naturaleza ha tenido a bien disponer como si fuera una especie de incienso para lo que está apunto de acontecer. El hombre se apoya en su cachava y se sienta en una piedra,…
Autor: Juan Cadarso
El cielo es la Plenitud de la comunión con Dios
Aprendamos un poco más sobre la comunión con Dios y cómo nos ayuda a mejorar nuestra vida y, al mismo tiempo, ayuda a mejorar la vida de los demás, porque…
Misericordia de Dios: Nunca se cansa de perdonarnos
La misericordia de Dios se manifiesta de diversas formas, ya sea a través del apoyo y la consolación de otras personas, del sacramento de la confesión que nos permite liberarnos…
Hábitos del Padre Pío que todos los católicos podemos practicar
San Pío de Pietrelcina, más conocido como el Padre Pío, nos deja unos cuantos hábitos espirituales que necesitamos conocer para tener una vida más cercana a Dios. Continúa leyendo este…