La devoción a la oración de la hora de la Divina Misericordia se basa en las revelaciones de Santa Faustina Kowalska, una monja polaca que recibió mensajes de Jesús durante su vida.
En estos mensajes, Jesús le indicó a Santa Faustina que a las 3 de la tarde, la hora en que murió en la cruz, se abría una ventana especial de misericordia para el mundo. Prometió grandes gracias a quienes rezaran a esa hora, especialmente por los pecadores.
Oración
Falleciste, Jesús,
pero el manantial de la vida brotó
para las almas y se abrió el océano
de la misericordia para el mundo entero.
Oh fuente de vida, insondable misericordia de Dios
Padre Todopoderoso y eterno,
envuelve el mundo entero y viértete
tu infinita misericordia sobre todos nosotros. Amén
Oh Sangre y Agua que brotaste
del Sagrado Corazón de Jesús como manantial
de infinita misericordia para todos nosotros, en ti confío.
Origen
La devoción a la Hora de la Misericordia se basa en las revelaciones de Santa Faustina Kowalska, una monja polaca que recibió mensajes de Jesús durante su vida. En estos mensajes, Jesús le indicó a Santa Faustina que a las 3 de la tarde, la hora en que murió en la cruz, se abría una ventana especial de misericordia para el mundo.
Promesas
Jesús prometió que, a la hora de las tres de la tarde, abriría las puertas de Su misericordia y derramaría abundantes gracias sobre las almas que invoquen Su misericordia. Aquellos que recen con devoción y confianza en esta hora recibirán la gracia de la conversión, especialmente los pecadores empedernidos.
Oración de la hora de la Divina Misericordia a las 3 de la Tarde: Puerta a la infinita Misericordia de Dios
La Oración de las 3 de la Tarde, también conocida como la Coronilla de la Divina Misericordia, es una devoción cristiana que ha cobrado gran relevancia en los últimos años. Originada a través de las revelaciones concedidas a santa Faustina Kowalska, esta oración nos invita a experimentar la inagotable misericordia de Dios, especialmente a la hora de la muerte de Jesús en la cruz.
Según los relatos de santa Faustina, Jesús le pidió que rezara y promoviera esta devoción, asegurando que quienes la recen obtendrán el perdón total de sus pecados y las penas debidas por ellos. De esta manera, la Oración de las 3 de la Tarde se ha convertido en un poderoso medio de acceso a la gracia divina.
Uno de los principales beneficios de esta oración es la posibilidad de recibir protección y salvaguardia divina. Jesús prometió a santa Faustina que quienes confían en su Divina Misericordia y la invoquen con fe, serán colmados de gracias y bendiciones, especialmente en los momentos más difíciles de sus vidas.
Además, rezar esta oración a la hora de la Divina Misericordia (las 3 de la tarde) es una forma de honrar la Pasión de Jesús y participar espiritualmente de su sufrimiento en la cruz. De este modo, los fieles pueden obtener indulgencias y acceder a una muerte santa, tal como lo prometió el Señor.
La devoción a la Divina Misericordia, especialmente a través de la oración a las 3 de la tarde, se ha convertido en una práctica espiritual profunda y reconfortante para millones de católicos en todo el mundo. Esta hora, conocida como la Hora de la Divina Misericordia, está enraizada en las revelaciones místicas de Santa Faustina Kowalska y destaca la importancia de meditar sobre la pasión y muerte de Jesucristo.
La Hora de la Divina Misericordia es un momento especial para los católicos, una oportunidad diaria para acercarse a la infinita misericordia de Dios y meditar sobre el sacrificio de Jesús. A través de esta devoción, los fieles encuentran consuelo, paz y una renovada confianza en el amor divino. La oración de las 3 de la tarde no solo es una tradición de fe, sino un canal de gracia y bendiciones para todos los que la rezan con devoción y confianza.