Las Letanías a la Reina del Cielo nos permite expresar y fortalecer nuestra devoción hacia la Virgen María, reconociendo su intercesión y su papel como madre espiritual.
Rezar las Letanías a la Reina del Cielo nos ayuda a crecer en amor y confianza hacia la Santísima Virgen, fortaleciendo nuestra relación con ella.
Oración
Cristo, ten piedad de nosotros.
Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, óyenos. Cristo, óyenos.
Cristo, escúchanos. Cristo, escúchanos.
Santa Maria, Emperatriz del cielo y tierra, ruega por nosotros.
Hija del Eterno Padre, ruega por nosotros
Madre del Eterno Hijo, ruega por nosotros
Esposa del Eterno y santo Espíritu, ruega por nosotros
Complemento de la inefable y beatísima Trinidad, ruega por nosotros
Espejo inmaculado y perfectísimo de la Divinidad, ruega por nosotros
Esfera de la Divina omnipotencia, ruega por nosotros
Centro de la bondad incomprensible, ruega por nosotros
Aurora de la eternidad interminable, ruega por nosotros
Lucero del eterno sol y luz inaccesible, ruega por nosotros
Gloria de la Jerusalén triunfante, ruega por nosotros
Virtud y fortaleza de la Jerusalén militante,ruega por nosotros
Alegría del pueblo santo y escogido, ruega por nosotros
Ejemplar de los supremos y abrasados Serafines, ruega por nosotros
Resplandor de los iluminados Querubines, ruega por nosotros
Santa y justa emulación de la angélica naturaleza, ruega por nosotros
Victoria de los ejércitos del Señor Dios, ruega por nosotros
Honra de la humana naturaleza, ruega por nosotros
Decoro y hermosura de todo lo criado, ruega por nosotros
Triunfo y triunfadora de los enemigos del Altísimo, ruega por nosotros
Nobilísimo objeto en pura criatura de loa predestinados, ruega por nosotros
Corona de los Santos, ruega por nosotros
Laureola de las vírgenes, ruega por nosotros
Flor candidísima de la castidad virginal, ruega por nosotros
Bálsamo oloroso de la pureza corporal, ruega por nosotros
Prodigio inexplicable de la pureza espiritual, ruega por nosotros
Vencedora de la muerte y del pecado, ruega por nosotros
Judit animosa que al príncipe de las tinieblas degollaste, ruega por nosotros
Mujer fuerte cuyo precio vino de lejos de la Divinidad, ruega por nosotros
Mujer invicta e invencible que a la antigua serpiente quebrantaste la cabeza, ruega por nosotros
Torre de David contra el infierno, ruega por nosotros
Escala de Jacob que llega al cielo, ruega por nosotros
Manantial de toda gracia y vida eterna, ruega por nosotros
Archivo de las riquezas del muy alto, ruega por nosotros
Origen de los dones de su diestra, ruega por nosotros
Restauradora de la inconstancia y culpa de Eva, ruega por nosotros
Arco del cielo que el sereno de la piedad anuncias, ruega por nosotros
Nave de la contratación del cielo cargada del pan que nos sustenta, ruega por nosotros
Arca incorruptible del nuevo y eterno testamento, ruega por nosotros
Tierra santa donde llovió el cielo el maná vivo, ruega por nosotros
Tierra de promisión que mana leche y miel de gracia, ruega por nosotros
Vellocino rociado con la misma Divinidad, ruega por nosotros
Mesa franca del pacífico y verdadero rey Asuero, ruega por nosotros
Zarza no consumida y abrasada, ruega por nosotros
Oculta vida que a las almas resucitas, ruega por nosotros
Antídoto contra el veneno de la serpiente antigua, ruega por nosotros
Glorioso fin de la sabiduría de Dios y su potencia, ruega por nosotros
Ester privilegiada de la común ley de la culpa, ruega por nosotros
Prudente reina que a tu pueblo librasteis de la muerte, ruega por nosotros
Reina sola de tus vasallos fidelísima, ruega por nosotros
Retrato que engrandeces a tu Artífice, ruega por nosotros
Monte santo donde se dio la ley de amor, ruega por nosotros
Memorial justo que ofrecemos al justo Juez los pecadores, ruega por nosotros
Pura criatura a Dios más inmediata, ruega por nosotros
Custodia del escondido Sacramento, ruega por nosotros
Fénix única que en tu fuego renovada regeneraste al mundo, ruega por nosotros
Pelícano que con tu sangre en tu Hijo alimentas a tus hijos, ruega por nosotros
Amantísima que amas hasta el fin a quien te ama, ruega por nosotros
Estampa del ser divino que acredita el ser humano, ruega por nosotros
Instrumento del amor inmenso y de sus obras, ruega por nosotros
Atalaya que avisa al navegante, ruega por nosotros
Receta para enfermos incurables, ruega por nosotros
Imán que lleva a Si los corazones, ruega por nosotros
Antorcha que da luz al que va a oscuras, ruega por nosotros
Refugio y sagrado para quien huye de la justicia, ruega por nosotros
Terror para las furias del infierno, ruega por nosotros
Jerusalén adornada con su esposo, ruega por nosotros
Esposa que pacificas al verdadero Sansón indignado con los hombres, ruega por nosotros
Abogada que sabiamente alegas nuestra causa, ruega por nosotros
Madre del amor hermoso y santa esperanza, ruega por nosotros
Madre del temor discreto y grandeza del corazón, ruega por nosotros
Flor del campo, ruega por nosotros
Rosa mística, ruega por nosotros
Lirio de los valles, ruega por nosotros
Huerto cerrado, ruega por nosotros
Fuente sellada, ruega por nosotros
Puerta del cielo, ruega por nosotros
Casa del sol, ruega por nosotros
Mi dulce vida por quien vivo y por quien muero, ruega por nosotros
Mi madre y mi maestra, por quien me gobierno, ruega por nosotros
María siempre virgen prudentísima, ruega por nosotros
De todo mal y culpa, líbrame Señora.
De la ira del Altísimo, líbrame Señora.
De su desgracia y ofensa, líbrame Señora.
De la muerte súbita e improvisa, líbrame Señora.
Del furor y saña de mis enemigos, líbrame Señora.
De la astucia maliciosa de la serpiente, líbrame Señora.
De la ira, odio y mala voluntad, líbrame Señora.
Del espíritu inmundo, líbrame Señora.
De la ofensa de mis hermanos y prójimos, líbrame Señora.
De la inconstancia en la virtud, líbrame Señora.
De la muerte eterna por el pecado, líbrame Señora.
De la muerte eterna por el pecado, líbrame Señora.
De la muerte eterna por el pecado, líbrame Señora.
En el día del juicio, líbrame Señora.
Por tu purísima Concepción inmaculada, líbrame Señora.
Por tu natividad santísima, líbrame Señora.
Por tu presentación al templo, líbrame Señora.
Por la encarnación del Verbo eterno en tus purísimas entrañas, líbrame Señora.
Por la dignidad inefable de ser Madre de Dios, líbrame Señora.
Por el gozo que de ver a Dios de Ti hecho hombre y adorado recibiste, líbrame Señora.
Por la santa conversación y vida que con El hiciste, líbrame Señora.
Por lo que en tu vastísimo corazón con la profecía del Santo Simeón sentiste, líbrame Señora.
Por el dolor que sentiste, cuando le perdiste en Jerusalén, líbrame Señora.
Por el dolor cuando viste su prisión, líbrame Señora.
Por el dolor de verle con la cruz a cuestas, líbrame Señora.
Por el dolor de verle clavar y levantar en ella, líbrame Señora.
Por el dolor de verle expirar en ella, líbrame Señora.
Por el dolor de verle bajar de la cruz y sepultar, líbrame Señora.
Por todos los dorares que en toda su pasión, sentiste, líbrame Señora.
Por el gozo de su resurrección, líbrame Señora.
Por el no conocido que tuviste en su admirable ascensión, líbrame Señora.
Por la plenitud de dones que con la venida del Espíritu Santo recibiste, líbrame Señora.
Por tu admirable asunción, líbrame Señora.
Por tu admirable exaltación y coronación, líbrame Señora.
Por la gloria accidental de la Divinidad que gozas, líbrame Señora.
Por la gloria que das a los bienaventurados, gozarás y darás por todas las eternidades, líbrame Señora.
Oración Final
Santísima e inmaculada, por haberte preservado el Altísimo de toda mancha de pecado para que fueses digna Madre de su Unigénito Hijo, que de tus virginales entrañas tomó carne humana y se hizo hombre, suplícote purísima y bendita entre todas las mujeres, que me alcances de tu dilecto Hijo perdón cumplido de todos mis pecados; que sea escrita en el número de los predestinados, y en esta vida alcance la gracia final con que merezca la eterna, que esperamos por Ti, Señora Nuestra,. y por el mismo Señor que vive y reina por todos los siglos de los siglos. Amén.
Promesas
Existen diversas promesas asociadas a la recitación de las letanías a la Virgen. Entre las más conocidas se encuentran:
- La Virgen María intercederá por nosotros ante Dios para alcanzar la gracia de la perseverancia final.
- La Virgen María nos protegerá del enemigo y de los peligros del mundo.
- La Virgen María nos consolará en las dificultades y nos ayudará a superarlas.
Origen
Las Letanías a la Reina del Cielo tienen su origen en la tradición católica y se basan en las distintas advocaciones y títulos que se le atribuyen a la Virgen María. A lo largo de los siglos, se han desarrollado diferentes versiones de estas letanías, reflejando la riqueza y diversidad de la devoción mariana en la Iglesia.
Las Letanías a la Reina del Cielo: Una Oración de Devoción y Protección
Las Letanías a la Bendita Virgen María son una hermosa y poderosa oración católica que nos invita a honrar y venerar a la Virgen María en su papel como Reina del Cielo. A través de una serie de invocaciones y respuestas, esta Letanías a la Bendita Virgen María nos permite expresar nuestra devoción a María y buscar su intercesión y protección en nuestras vidas.