El alcalde de Madrid está en lo cierto y el aborto tiene consecuencias físicas y sobre todo anímicas, morales y espirituales. Los que alguna vez hemos vivido cerca de este drama lo sabemos y nunca podremos olvidarlo. Ni soy médico para determinar si estas consecuencias –terribles– constituyen un síndrome, un trauma o cualquier otro término, ni me siento capacitado para dar lecciones a nadie sobre lo que tiene que hacer llegado el caso. Me gustaría poder decir más pero sería estafarlos y nunca ante ustedes he tratado de parecer mejor de lo que soy. Mi humanidad imperfecta, defectuosa y sobre todo débil me alcanza para llegar justo hasta esta frase.
Autor: Salvador Sostres
8 razones que explican por qué muchos católicos ni evangelizan ni se lo han planteado ni plantearán
Dwight Longenecker es un conocido sacerdote católico con amplia experiencia. Converso al catolicismo su camino hacia la Iglesia fue paulatino pues pasó de pastor fundamentalista protestante a evangélico de tipo carismático, luego…
Hábitos del Padre Pío que todos los católicos podemos practicar
San Pío de Pietrelcina, más conocido como el Padre Pío, nos deja unos cuantos hábitos espirituales que necesitamos conocer para tener una vida más cercana a Dios. Continúa leyendo este…
El cielo es la Plenitud de la comunión con Dios
Aprendamos un poco más sobre la comunión con Dios y cómo nos ayuda a mejorar nuestra vida y, al mismo tiempo, ayuda a mejorar la vida de los demás, porque…



















