Este 29 de septiembre, domingo y fiesta de los Arcángeles, entorno a las 11 de la mañana el Espíritu Santo ha transformado, mi vida y mi corazón para vivir solo para Él. Y como el Espíritu nos lleva a recordar la obra de Dios en nuestra vida, voy a hacer memoria con este testimonio de lo que Dios y el Espíritu ha hecho en mi vida.
He nacido el 11 de enero de 1970, fui bautizada el 18 de enero del mismo año para convertirme en hija de Dios, por la unción del Espíritu. Soy la mayor de dos hermanos. Una chica, que soy yo, y mi hermano Miguel Ángel. Mi infancia y adolescencia no fue fácil. Mi corazón de niña moldeable y frágil experimentó muchas heridas, principalmente de mis padres, y de mi entorno familiar. Una madre superprotectora y un padre inmaduro, inestable y muy débil hicieron de mi persona una niña dependiente, y con miedo. En mi casa las palabras que…
Autor: Un camino de fe
8 razones que explican por qué muchos católicos ni evangelizan ni se lo han planteado ni plantearán
Dwight Longenecker es un conocido sacerdote católico con amplia experiencia. Converso al catolicismo su camino hacia la Iglesia fue paulatino pues pasó de pastor fundamentalista protestante a evangélico de tipo carismático, luego…
Los beneficios de la oración
“Más que nada, la oración te permite echar un vistazo a tu interior y alinearlo con el corazón de Dios. La oración no es un monólogo en el cual nos…
Jacinta Marto, la pastorcita que nos enseña el valor del sacrificio
El 20 de febrero se cumplió el centésimo aniversario de la muerte de Santa Jacinta Marto, la pastorcilla de Fátima fallecida en Lisboa con sólo diez años. Todos conocemos la …