En el último artículo que escribí ponía el ejemplo de aquel necio que descansaba cómodamente en su camarote de un transatlántico mientras éste se va a pique. “A mí me da igual, aquí no ha llegado el agua”, barrunta estúpidamente. Cuando un barco se hunde, todos se hunden. Y cuando una sociedad se hunde, podríamos decir también, todos terminamos por hundirnos.
Y, miren, nuestra cultura, nuestra civilización (o lo que queda de ella) está colapsando. Estoy seguro de que ustedes ya se habían apercibido, pero lo menciono por si acaso queda algún ingenuo de los que dormitan aún en su camarote, en su burbuja, en su pecera. El hundimiento es irreversible, inevitable.
Pero no se me desanimen. Aquí es cuando comienza lo bueno.
Podríamos empezar citando a Gilbert Keith Chesterton con una de sus más célebres frases, escrita ya hace un siglo: “A cada época la salva…
Autor: Álex Navajas

Continuar leyendo en: www.religionenlibertad.com
No celebres Halloween, sino quieres rendir a Satán sin saberlo.
Holywins, es la alternativa al culto a los demonios que celebramos cada primero de noviembre Tal vez muchos de nosotros hemos celebrado Halloween cuando éramos niños, porque nos parecía divertido…
Los 18 beneficios de asistir a la Santa Misa
La misa es el encuentro con Dios Nuestro Señor, pero no sólo con Él, también con nuestro interior, haciendo que mejoremos cada día más como personas. Este encuentro con Nuestro…
Impresionantes evidencias de la presencia de Dios en el vino y el pan
Desde hace muchos años han ocurrido manifestaciones de Dios en el momento de la eucaristía. Se han desencadenado una serie de fenómenos, en diversos países de todo el mundo que…