(Matteo Matzuzzi en Il Foglio)-Los jóvenes no son ateos, sino indiferentes al hecho religioso. Que Dios exista o no no es su problema. Su problema es encontrar la fe en una Iglesia que, entre luchas ecologistas y humanitarias, ofrece lo que el mundo ya les da.
Sobre las mesas de los obispos se amontonan estudios, investigaciones y encuestas: el estribillo es el mismo desde hace tiempo -desde hace algunas décadas, hay que decirlo para evitar inmediatamente ser dolorosamente incluido en la lista negra de los llamados antibergoglianos-: la gente ya no va a la iglesia. Las misas se espacian y si antes las parroquias revisaban horarios y servicios porque «no hay curas», ahora el razonamiento es más sofisticado: se recortan las celebraciones porque ya no hay fieles. En invierno hace frío, al menos en el norte, y no tiene sentido mantener abiertas las iglesias y pagar elevadas…
Autor: redaccioninfovaticana

Continuar leyendo en: infovaticana.com
Los beneficios de la oración
“Más que nada, la oración te permite echar un vistazo a tu interior y alinearlo con el corazón de Dios. La oración no es un monólogo en el cual nos…
Mitos sobre el yoga, el budismo y otras prácticas espiritistas que te alejan de Dios
El padre Luzón advierte sobre los posibles peligros y consecuencias de involucrarse en estas prácticas desde una perspectiva cristiana. ¡Continúa leyendo y no te pierdas los detalles sobre los mitos…
7 pasos para una parroquia: de tener «consumidores de sacramentos» a multiplicar los discípulos
«Id y bautizad y haced discípulos», pedía Jesús. Las parroquias, bautizar, bautizan. Bautizan a cualquier bebé que les lleven. Pero ¿hacen discípulos? Un discípulo es alguien que tiene una relación…