Autor: Juan Cadarso
«Soy un asesino de masas, responsable de la muerte de 75.000 niños inocentes», afirmó en una ocasión el doctor Bernard Nathanson. Si el que fuera director de una de las clínicas donde más abortos se practicaron en todo Occidente hubiera vivido en la Hungría del siglo XXI, probablemente, hoy no se arrepentiría de lo que hizo.
Porque, como él mismo reconoció, lo que le abrió los ojos, a este futuro converso al catolicismo, fue la tecnología. Las técnicas para monitorizar al feto fueron avanzando tanto, que, cada día que pasaba, le iba quedando más claro que lo que allí dentro había era una vida humana. Nathanson abjuró del aborto y abandonó su clínica de Nueva York.
Un paso más por la vida
Influido o no por la historia del doctor Nathanson, el Gobierno de Hungría no quiere que se repitan casos como el suyo, y da un paso más en sus políticas provida. Para ello, a partir del próximo…
Continuar leyendo en: www.religionenlibertad.com
La cultura es el camino de la Nueva Evangelización
El objetivo del Papa San Juan Pablo II de involucrar a la cultura en la Nueva Evangelización fue la construcción de una civilización del amor como fuente de libertad y…
Jacinta Marto, la pastorcita que nos enseña el valor del sacrificio
El 20 de febrero se cumplió el centésimo aniversario de la muerte de Santa Jacinta Marto, la pastorcilla de Fátima fallecida en Lisboa con sólo diez años. Todos conocemos la …
¿Sabes lo que sucede durante la celebración de la misa?
Te presentamos una selección de videos y contenido para que puedas conocer qué pasa mientras asistimos a misa, las cosas que suceden y que no podemos ver con nuestros ojos, pero que no por… seguir leyendo