Argentina, Marcha del Orgullo Gay de 2015. Para Javier solo era una ocasión más de divertirse. Pero esta vez fue distinta, porque empezó a ser consciente de cómo lo vivía la multitud.
«Como una película, en blanco y negro, a cámara lenta: una mujer desnuda y enloquecida en una carroza, travestis insultando y drogándose, políticos, familias que aplaudían… y mucha podredumbre«, relata.
Incapaz de aguantar las «nauseas» que le producía, huyó y entró en la primera iglesia que vio. Comenzaba una misa. En ese preciso instante, tras años de acoso diabólico, posesión y adicción, supo que «no había vuelta atrás»: «Ahí comenzó el cambio, renuncie a mi homosexualidad«.
Con estas palabras, el argentino relata en sus redes sociales, el momento en que su vida cambió.
Javier recibió educación católica en los mejores colegios durante su infancia, pero no se…
Autor: José María Carrera
Los 18 beneficios de asistir a la Santa Misa
La misa es el encuentro con Dios Nuestro Señor, pero no sólo con Él, también con nuestro interior, haciendo que mejoremos cada día más como personas. Este encuentro con Nuestro…
Misericordia de Dios: Nunca se cansa de perdonarnos
La misericordia de Dios se manifiesta de diversas formas, ya sea a través del apoyo y la consolación de otras personas, del sacramento de la confesión que nos permite liberarnos…
8 Claves para activar y acercar más fieles a nuestra parroquia
Ahora es cuando se necesita recuperar la vida Espiritual y la Fe, que nos llevará a la felicidad y tranquilidad anhelada. En este artículo te daremos algunas ideas…seguir leyendo