Cursillos de Cristiandad es un movimiento nacido en España hace más de 70 años y por el que han pasado decenas de miles de personas, muchas de ellas alejadas de la fe y que se encontraron aquí con la Iglesia. Este método kerigmático sigue siendo más actual que nunca, pues el anuncio del Evangelio es a día de hoy más urgente, si cabe. Aquí ofrecemos todo lo que debes saber sobre esta realidad eclesial.
Índice de temas sobre este movimiento
-¿Qué es Cursillos de Cristiandad?
-¿En qué consiste un cursillo de cristiandad?
-¿Cómo nació Cursillos de Cristiandad?
-¿Quién fundó los Cursillos?
-¿Cómo se fue expandiendo Cursillos de Cristiandad?
-¿Qué es una Ultreya?
-¿Cuántas personas han participado en Cursillos de Cristiandad?
-¿Qué han dicho los Papas sobre Cursillos de Cristiandad?
-¿Qué es Cursillos de Cristiandad?
-Se trata de un movimiento de la Iglesia católica que nació en España en la década de 1940 y que en estos momentos tiene una difusión mundial. En 2014, el Pontificio Consejo para los Laicos publicó un decreto en el que reconocía al Organismo Mundial del Movimiento de
Cursillos de Cristiandad «como estructura de coordinación, promoción y difusión de
la experiencia de los Cursillos de Cristiandad, confiriéndole personalidad jurídica
según el derecho canónico”.
Cursillos es un método propio de evangelización que está al servicio de la Iglesia y se caracteriza por una serie de rasgos muy identificativos. Es especialmente kerigmático, se centra en la proclamación del anuncio cristiano con vistas a la conversión. Por ello, es un método en el que el testimonio de vida y las relaciones de amistad son cauce fundamental para la experiencia religiosa. Por otra parte, como en todo método evangelizador, la oración y la celebración son pilares fundamentales.
Ultreya a nivel español celebrada en Guadalajara en 1997.
A lo largo de su existencia, este movimiento ha creado multitud de núcleos de cristianos que trabajan por llevar el Evangelio al mundo. Miles de personas, muchas de ellas antes alejadas de la fe, gracias a su contacto con un cursillo han cambiado sus vidas y luego revitalizado instituciones y movimientos.
-¿En qué consiste un cursillo?
– Un cursillo debe dividirse en tres etapas, que desde este movimiento consideran inseparables: precursillo, cursillo y postcursillo.
Precursillo: es la fase inicial del método y es de preparación. En él se pretende buscar y preparar a personas en los diversos ambientes de la sociedad, con opción preferencial por los alejados, para su transformación en cristianos responsables y auténticos. Para ello también se realiza un estudio y discernimiento de los diferentes ambientes y de las personas. La preparación de los candidatos es un elemento esencial del método de Cursillos. Es indispensable dar a los candidatos seleccionados una preparación adecuada que facilite el aprovechamiento del Cursillo y la inserción comunitaria en el Postcursillo.
Cursillo: es la fase central del método y la que propicia una auténtica experiencia (con uno mismo, con los demás y con Dios). Se desarrolla como una convivencia, normalmente de tres días, donde se vive lo fundamental cristiano. Es la fase en la que se sigue un modelo más definido y estructurado. Los tres días del Cursillo tienen mucha importancia, pues la experiencia confirma que este encuentro con Dios durante ese fin de semana puede marcar toda una vida.
Postcursillo: tras el cursillo propiamente dicho toca madurar y crecer en la fe, en el descubrimiento realizado durante ese fin de semana. Para ello, se crean grupos (ultreyas) donde compartir vida, fe y compromiso y, desde ellos, promover la fermentación evangélica de los ambientes, por la actuación de las personas que están en estas reuniones.
-¿Cómo nació Cursillos de Cristiandad?
– Nació en la isla de Mallorca, entre los años 1940 y 1949. Surgió del apostolado de un grupo de seglares y sacerdotes que formaban parte del Consejo Diocesano de los Jóvenes de Acción Católica (JAC) de Mallorca. En aquellos años se estaba preparando intensamente una gran peregrinación nacional de los JAC a Santiago de Compostela, que se celebraría en el año 1948. Se organizaron diversas actividades en parroquias, entre ellas la celebración de “Cursillos de Adelantados de Peregrinos”, dirigidos por miembros del Consejo Nacional de los JAC, y “Cursillos de Jefes de Peregrinos”, dirigidos por miembros de los Consejos Diocesanos.
En estos cursillos se percibió la posibilidad de desarrollar algo nuevo, algo que permitiera que el contenido esencial del cristianismo fuera captado en toda su intensidad incluso por quienes vivían al margen de la religión. Se llevó a cabo un arduo trabajo que fue inspirando algo nuevo, que se concretó en lo que después se llamaría “Cursillos de Cristiandad”, con rasgos de los cursillos anteriores, pero diferente por su enfoque, finalidad y sentido.
-¿Quién fundó los Cursillos?
-Cursillos de Cristiandad es un método creado por distintos laicos y sacerdotes. El propio Pontificio Consejo para los Laicos explicaba en un decreto: «En el grupo de iniciadores de Cursillos de Cristiandad se reconoce una especial importancia a un laico, Eduardo Bonnín Aguiló (1917-2008), al entonces obispo de Mallorca, Juan Hervás y Benet (1905-1982) y al sacerdote Sebastián Gayá Riera (1913-2007)».
Eduardo Bonnín, con San Juan Pablo II.
-¿Cómo se fue expandiendo Cursillos de Cristiandad?
-En enero de 1949 se celebró el que se considera propiamente el primer Cursillo de Cristiandad, en el monasterio de San Honorato de Mallorca. Sólo en ese año se celebraron 20 cursillos y en cinco años se llegó al centenar. Desde la isla saltó a la península, extendiéndose por el resto de diócesis españolas. El salto internacional se produjo en primer lugar a América. Laicos y sacerdotes que participaron del movimiento en diversas diócesis de España lo llevaron por toda Latinoamérica. El primer país fue Colombia, donde se celebró el primer Cursillo fuera de España y el primer Cursillo de mujeres (1953). Muy rápidamente fue llegando al resto de países y ya en 1963 estaba prácticamente en toda América.
En Europa fueron Portugal, Austria e Italia, en 1960, los primeros países que recibieron los Cursillos. A Alemania llegó en 1961 desde Austria, y más adelante llegó a otros países centroeuropeos, así como a Inglaterra e Irlanda. En 1974 se abrió pasó en Europa del Este.
En Asia se inició en Filipinas en 1962, donde llegó desde Estados Unidos. En Australia comenzó en 1963, implantándose primero entre inmigrantes españoles y posteriormente, con ayuda de un grupo de cursillistas de Estados Unidos, en 1965, comenzó su desarrollo entre la población propia (en inglés). Desde Filipinas se introdujo en otros países como Vietnam, Corea, Taiwán, o Tailandia. Aunque de forma más limitada, Cursillos también llegó a algunas zonas de África como Angola y Mozambique, Tanzania, Nigeria, Guinea, Benín o Togo.
-¿Qué es una Ultreya?
– No se puede entender Cursillos de Cristiandad sin sus ultreyas. Se trata de una antigua palabra que usaban los peregrinos de Compostela cuando se encontraban para saludarse y animarse a lo largo del camino. Esta palabra deriva del latín ultra y significa “¡Sigue adelante!”.
Los cursillistas la usan para designar los encuentros que tienen lugar después del Cursillo. En estas reuniones, que suelen ser semanales o quincenales, se juntan los grupos de una parroquia o de una zona, pero de manera excepcional pueden hacerlo los miembros de un país entero. Ya sea a base del trípode (piedad, estudio, acción) o a partir de un texto del Evangelio, en la Ultreya se escuchan testimonios de vida interior y experiencias apostólicas.
-¿Cuántas personas han participado en Cursillos de Cristiandad?
-La cifra es difícil de cuantificar, pero sólo en España han pasado por los más de 10.500 cursillos que se han realizado estas décadas más de 250.000 personas, entre ellas el cardenal Carlos Amigo o el iniciador del Camino Neocatecumenal, Kiko Argüello, cuya experiencia en Cursillos fue fundamental para iniciar esta otra realidad eclesial. Extendido por todo el mundo, miles de personas pertenecen en la actualidad a este movimiento católico y evangelizador.
-¿Qué han dicho los Papas de Cursillos de Cristiandad?
Papa Francisco: «Es muy bello lo que hacéis a través de los Cursillos de Cristiandad: ayudar a encontrar a Jesús.”
San Juan Pablo II: «El Cursillo de Cristiandad es un instrumento suscitado por Dios para el anuncio del Evangelio en nuestro tiempo”.
San Pablo VI: «Cursillistas de Cristiandad: Cristo, la Iglesia y el Papa cuentan con vosotros.”