VATICANO, 27 Abr. 22 (ACI Prensa).-
La Pontificia Comisión para la Protección de Menores está realizando esta semana una nueva Asamblea Plenaria en el Vaticano y que concluirá el 29 de abril con una audiencia con el Papa Francisco.
Según informó un comunicado oficial, el trabajo de estos días está esbozando “los próximos pasos en su asistencia a las Iglesias locales en la elaboración y aplicación de estrategias y directrices de salvaguardia, especialmente en lo que respecta al acompañamiento de las víctimas y los supervivientes de los abusos”.
Con ocasión de la promulgación de la constitución apostólica Praedicate Evangelium, sobre la reforma de la Curia Romana el pasado 19 de marzo, el presidente de la Pontificia Comisión para la Protección de Menores, el Cardenal Sean O’Malley, explicó cómo influirá en el trabajo que realizan contra los abusos en la Iglesia.
La nueva constitución apostólica “sobre la Curia Romana y su servicio a la Iglesia en el mundo” entrará en vigor el 5 de junio de 2022, Solemnidad de Pentecostés, informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
Entre los cambios previstos en ”Praedicate Evangelium” destaca que la Pontificia Comisión para la Protección de Menores estará dentro del Dicasterio para la Doctrina de la fe” y que su objetivo será “proporcionar al romano pontífice consejo y asesoramiento y proponer las iniciativas más adecuadas para la protección de los menores y de las personas vulnerables”.
En esta línea, el Cardenal O’Malley señaló en una declaración oficial que con este cambio “por primera vez, el Papa Francisco ha hecho de la salvaguardia (safeguarding) y la protección de los menores una parte fundamental de la estructura del gobierno central de la Iglesia: la Curia Romana”.
“Vincular la Comisión más estrechamente con el trabajo del nuevo ‘Dicasterio para la Doctrina de la Fe’ representa un avance significativo en la mejora del lugar y el mandato de la Comisión que solo puede conducir a una cultura más fuerte de la salvaguardia en toda la Curia y toda la Iglesia”, advirtió entonces el Purpurado.
Asimismo, el Cardenal O’Malley describió que la Pontificia Comisión mantendrá “su estatus de órgano separado dentro del Dicasterio” y contará con “acceso directo al Santo Padre”, así como también tendrá “su propia dirección y personal”.
Por último, “la renovada y reafirmada Pontificia Comisión desempeñará un papel cada vez más incisivo para garantizar que la Iglesia sea un lugar seguro para los niños y las personas vulnerables”, dijo el Cardenal estadounidense que también forma parte del Consejo de Cardenales que asesora al Papa Francisco.