Autor: Pablo J. Ginés
En mayo y junio de 2021 la prensa canadiense y mundial anunció que se habían descubierto «fosas masivas» y «fosas comunes sin marcar» o «tumbas sin marcar» en antiguas escuelas residenciales de Canadá: en Kamloops (reserva india), en la Escuela Residencial Marieval y en la misión St Eugene, cerca de Cranbook. Pero en realidad eran solo sospechas a partir de un georradar que detecta irregularidades en el terreno (pueden ser rocas, raíces, cualquier cosa, no se parece nada a un escáner de aeropuerto).
Ha pasado un año y nadie ha excavado, no se ha detectado ningún cadáver, ningún forense ha descubierto un cuerpo, no hay resto de ninguna fosa.
Después de un año de anunciarse las «tumbas» (que nadie ha comprobado) el periodista Jonathan Kay, editor de la revista Quillette, en un demoledor artículo del 22 de julio de 2022, escribió:
«Resultó ser la historia de un comportamiento de…