Santa Hildegarda de Bingen vivió hace cerca de mil años en Alemania. Desde pequeña se dio cuenta de que «veía cosas» que otros no percibían. Se trataba de un don que le otorgó Dios para descubrir la «viriditas» o «fuerza verde» que reside en todos los seres creados.
Y no, no es ciencia-ficción: la propia Iglesia refrendó sus enseñanzas distinguiendo a Santa Hildegarda como una de las únicas cuatro Doctoras de la Iglesia a lo largo de la Historia. Posteriormente, tanto Juan Pablo II como Benedicto XVI reconocieron la enorme aportación de esta monja benedictina.
Galanga, pelitre y pelargonio
Sus remedios medicinales se hicieron inmensamente populares en la Europa del medievo, y la ciencia moderna ha confirmado su eficacia. Álex Navajas ha entrevistado en el canal de YouTube Creo TV a Juan Antonio Timor, el mayor especialista de España sobre la santa alemana y que dirige…
Autor: ReL
Continuar leyendo en: www.religionenlibertad.com
Cómo afirmar la veracidad de los evangelios
Hay una técnica muy utilizada por los detectives para encontrar información que les ayude a armar el cuadro completo de una escena, es el Soporte Involuntario entre Testigos. Esta técnica…
¿Cómo rezar cuándo nos abruma las preocupaciones?
Las emociones que acompañan a las crisis son a menudo descritas como una sensación similar a olas gigantes rompiendo tú alrededor. Por eso, en sus Ejercicios Espirituales, San Ignacio de Loyola proporcionaba el…
Misericordia de Dios: Nunca se cansa de perdonarnos
La misericordia de Dios se manifiesta de diversas formas, ya sea a través del apoyo y la consolación de otras personas, del sacramento de la confesión que nos permite liberarnos…



















