Autor: Pedro Trevijano
Recuerdo que en tiempos del Concilio, mi obispo de aquella época nos dijo que a la pregunta de si añadirían algún nuevo dogma de fe contestó: María, Medianera de todas las gracias. En línea opuesta, no hace mucho oí a un sacerdote oponerse a la intercesión de la Virgen y los santos, si bien ya en los evangelios tenemos varios casos de intercesión, de los que el más importante es la intervención de la Virgen en las bodas de Caná (Jn 2,1-11). Veamos por tanto qué es lo que nos dice el Magisterio de la Iglesia.
El Concilio Vaticano II aborda este problema en la constitución Lumen Gentium. Allí nos dice: “Uno solo es nuestro Mediador según las palabra del Apóstol: «Porque uno es Dios, y uno también el Mediador entre Dios y los hombres, el hombre Cristo Jesús, que se entregó a sí mismo para redención de todos» (1 Tm 2, 5-6). Sin embargo, la misión maternal de María para con los hombres…