Me tomo la libertad de proponer al lector que se adentre en este breve texto de San Agustín. Habla sobre la insignificancia como un don de Dios:
¿No es digno de toda admiración el curso ordinario de la naturaleza? Todas las cosas están llenas de milagros, pero la frecuencia los ha hecho vulgares. Intenta darme explicación; mi pregunta versará sobre cosas que vemos a diario. Explícame por qué la semilla de un árbol tan grande como la higuera es tan pequeña que apenas puede verse, mientras que la humilde calabaza la produce tan grande. Sin embargo, la semilla de mostaza, tan pequeña y apenas visible; esa pequeñez e insignificancia -se percibe si se aplica la inteligencia y no los ojos- oculta también la raíz y lleva dentro el tallo, las hojas y el fruto que aparecerá en el árbol. Todo está anticipado en la semilla. No es necesario pasar revista a muchas cosas; las…
Autor: La divina proporción

Continuar leyendo en: www.religionenlibertad.com
Los 12 pasos que nos llevan a la esclavitud del orgullo, según San Bernardo
El orgullo es un pecado que puede manifestarse de diversas formas y llevarnos por un camino de autodestrucción espiritual. Continúa leyendo este artñiculo para conocer cuales son los pasos que…
La cultura es el camino de la Nueva Evangelización
El objetivo del Papa San Juan Pablo II de involucrar a la cultura en la Nueva Evangelización fue la construcción de una civilización del amor como fuente de libertad y…
La Iglesia al fin de los tiempos
Artículo realizado por el Padre Emmanuel André X. El Advenimiento del Juez Supremo Vano es intentar precisar la hora en que tendrá lugar el segundo advenimiento de Nuestro Señor,siendo como es…