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REDACCIÓN CENTRAL, 18 Ago. 22 (ACI Prensa).-
Cada 18 de agosto la Iglesia católica recuerda a un gran chileno: San Alberto Hurtado. Este sacerdote jesuita buscó imitar a Jesús en medio de las circunstancias sencillas de la vida, en el día a día de una “vida ordinaria”, que Dios tornó extraordinaria.
Alberto quiso vivir como Jesús, consagrado a los pobres, huérfanos e indefensos, y por eso se preocupó por darle a cada uno de ellos una vida digna, un “hogar”. En los barrios populares de Santiago, al lado de la clase trabajadora, el santo fue expresión de fortaleza, generosidad y entrega incondicional.
Un sueño que se hizo realidad
Alberto Hurtado Cruchaga nació el 22 de enero de 1901, en Viña del Mar, Chile, en el seno de una familia católica. Sus padres, Alberto Hurtado y Ana Cruchaga, vivían en el fundo Los Perales de Tapihue, cerca de la localidad de Casablanca,…

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