, 27 Feb. 23 (ACI Prensa).-
El tiempo que los cristianos empleamos para preparar los misterios centrales de la fe (Pasión, Muerte y Resurrección), la Cuaresma, es propicio para profundizar en la conversión personal y una ocasión especial para obtener una indulgencia plenaria.
La Iglesia Católica explica en su Catecismo que la indulgencia consiste en “la remisión ante Dios de la pena temporal por los pecados, ya perdonados, en cuanto a la culpa". Esta se consigue por mediación de la Iglesia cuando "un fiel dispuesto" cumple "determinadas condiciones".
La Iglesia es la que "distribuye y aplica con autoridad el tesoro de las satisfacciones de Cristo y de los santos”, expone el Catecismo.
Estas indulgencias pueden ganarse para uno mismo o ser aplicadas por el alma de un difunto, pero nunca por alguien vivo. Se distingue además entre las parciales y las plenarias.
En…
Autor:
Continuar leyendo en: www.aciprensa.com
Ex ateos que comprobaron que Dios, tiene un plan perfecto para cada uno de nosotros
Muchas veces Dios espera y actúa sobre nosotros a través de terceras personas o sucesos que pueden parecer muy sencillos y no llaman nuestra atención. Y en realidad, su plan…
La cultura es el camino de la Nueva Evangelización
El objetivo del Papa San Juan Pablo II de involucrar a la cultura en la Nueva Evangelización fue la construcción de una civilización del amor como fuente de libertad y…
Misericordia de Dios: Nunca se cansa de perdonarnos
La misericordia de Dios se manifiesta de diversas formas, ya sea a través del apoyo y la consolación de otras personas, del sacramento de la confesión que nos permite liberarnos…