Ahora que han pasado años de aquel atropello ya podemos decirlo sin ambages. Todas aquellas medidas alucinantemente vejatorias que nos impusieron durante la plaga coronavírica, con enloquecedores arrestos domiciliarios, toques de queda arbitrarios, utilización demente de mascarillas en espacios abiertos, distancias de seguridad arbitrarias, imposición de pasaportes para asegurar el rastreo de la población dócil y estigmatizar a la rebelde y demás prohibiciones desquiciadas fueron un experimento biopolítico. Todas aquellas consignas aberrantes que impusieron los gobiernos y propalaron los loritos sistémicos no tenían otro objeto sino convertirnos en papilla humana genuflexa y temblona.
Pero nada de esto hubiese sido posible sin un eclipse de la conciencia moral, sin un desvanecimiento del sentido común. Nuestros gobernantes instauraron un reino del absurdo, una suerte de…
Autor: Juan Manuel de Prada
El cielo es la Plenitud de la comunión con Dios
Aprendamos un poco más sobre la comunión con Dios y cómo nos ayuda a mejorar nuestra vida y, al mismo tiempo, ayuda a mejorar la vida de los demás, porque…
8 razones que explican por qué muchos católicos ni evangelizan ni se lo han planteado ni plantearán
Dwight Longenecker es un conocido sacerdote católico con amplia experiencia. Converso al catolicismo su camino hacia la Iglesia fue paulatino pues pasó de pastor fundamentalista protestante a evangélico de tipo carismático, luego…
La Iglesia al fin de los tiempos
Artículo realizado por el Padre Emmanuel André X. El Advenimiento del Juez Supremo Vano es intentar precisar la hora en que tendrá lugar el segundo advenimiento de Nuestro Señor,siendo como es…



















