Autor: Miguel Ángel Irigaray Soto
El Papa Francisco está dedicando las últimas catequesis de los miércoles a hablar de la ancianidad e, incluso, con motivo de la II Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores, que se celebrará el próximo 24 de julio, la Penitenciaría Apostólica ha concedido una indulgencia plenaria «a los abuelos, a los ancianos y a todos los fieles que, movidos por el verdadero espíritu de penitencia y caridad», participen en la «solemne celebración que el Santo Padre Francisco presidirá en la Basílica Papal del Vaticano o en las diversas celebraciones que tendrán lugar en todo el mundo». Esta gracia se concede también el mismo día a los fieles que dediquen «un tiempo adecuado a visitar, de forma presencial o virtual, a través de los medios de comunicación, a los hermanos ancianos en situación de necesidad o dificultad (como los enfermos, los abandonados, los discapacitados)».
Todo ello apela a…