Hace ya varios años que se ha puesto de moda cancelar, aniquilar, “vaporizar” -diría George Orwell– todo aquello que suene a “discurso de odio” (en inglés, “hate speech”). Todo dicho, imagen o acción capaz de ofender los hipersensibles oídos, ojos y/o corazones de los adalides de la tolerancia políticamente correcta debe ser erradicado de la faz de la tierra, como si de virus se tratara.
En efecto, hay quien se horroriza y patalea si uno dice que el aborto es un homicidio, porque -dicen- hay que evitar ofender y/o estigmatizar a las mujeres que alguna vez abortaron. En algunos lugares del mundo que se tienen por “civilizados” -como la “pérfida Albión”-, uno hasta puede ir preso por rezar en silencio, parado frente a una clínica abortista…
También hay quien se rasga las vestiduras si uno afirma que sólo hay dos sexos, varón y mujer. O si uno si se…
Autor: Álvaro Fernández Texeira Nunes
Ex ateos que comprobaron que Dios, tiene un plan perfecto para cada uno de nosotros
Muchas veces Dios espera y actúa sobre nosotros a través de terceras personas o sucesos que pueden parecer muy sencillos y no llaman nuestra atención. Y en realidad, su plan…
Comulgar en la boca en época de pandemia
Te queremos compartir este artículo del Padre Ángel María Rojas, S.J. escrito en agosto del 2020, donde nos explica cómo comulgar en la boca, sobre todo, en estos tiempos de…
Informe anual Planned Parenthood USA 2020, indica que asesinó a 383.000 bebés en abortos
Lo llamemos como lo llamemos es un asesinato, un asesinato del que luego se aprovecha todo, sangre, vísceras etc. para diversas industrias. No, nos podemos quejar los humanos del siglo…