Autor: Daniel Arasa
El presidente norteamericano Dwigt Eisenhower dijo en cierta ocasión: “Cada arma que se fabrica, cada guerra que se emprende, cada cohete que se dispara, significa, en último sentido, un robo a quienes padecen hambre y no son alimentados, quienes padecen frío y no son vestidos…”.
Si lo dijo con sinceridad y convencimiento, su testimonio es especialmente valioso por provenir de un militar del más alto nivel, del general que estuvo al frente de las fuerzas aliadas en Europa en la Segunda Guerra Mundial y que, por tanto, mandó a millones de soldados e hizo uso de las armas en gran escala.
Lo expresado por quien fue presidente de los Estados Unidos, el país que ya entonces, en los años 50 del siglo pasado, y también ahora, es el que gasta más en armamento de todo el mundo, es válido de manera permanente, pero adquiere más relevancia en este momento en que, a raíz de la guerra de…