Autor: Pablo J. Ginés
Matar más bebés con más aborto, y más ancianos y más enfermos con eutanasia y suicidio asistido, y acosar a los médicos que aún defienden la vida con listas negras de objetores de conciencia. En una España envejecida y debilitada -los españoles tienen una edad media de 44 años; hay provincias que la edad media es 51-, la cultura anti-vida sube más escalones. Tras la implantación de la eutanasia, en vez de buenos cuidados paliativos– el Gobierno PSOE-Podemos plantea ahora una modificación a su ley de aborto de 2010.
Se quitará el periodo de reflexión de 3 días y no se entregará ya el «sobre» con datos de ayudas a maternidad (en realidad casi no hay ninguna, pero a veces se daba una lista de asociaciones provida o religiosas que ayudan a embarazadas y eso podía restar ingresos a la industria abortista).
También se dificultará que voluntarios provida puedan ofrecer ayudas, esperanza…