Autor: ReL
Como en el caso de Maurice Caillet y Serge Abad-Gallardo, para Louis-Alcine el momento de ingresar en la masonería coincidió con los primeros éxitos de una brillante carrera profesional: «Yo era un treintañero rodeado de triunfadores, todos ellos gente intelectualmente brillante. Llevaba diez años casado con una mujer alegre e inteligente».
Los fines de semana encadenaban cenas y salidas mundanas con agradables conversaciones entre amigos de su ámbito. No tenía grandes preocupaciones: «La vida me sonreía. Me propusieron hacerme masón y acepté, halagado de que una logia del Gran Oriente de Francia me hubiese escogido».
El bautizo
El 15 de febrero de 2005 nació su cuarta hija y se planteó la cuestión de su bautizo.
Hay muchos que se definen como ‘creyentes no practicantes’, pero el caso de Louis-Alcine era distinto: «Solo para no suprimir a Dios de mi vida totalmente, yo seguía…

Continuar leyendo en: www.religionenlibertad.com
Los 12 pasos que nos llevan a la esclavitud del orgullo, según San Bernardo
El orgullo es un pecado que puede manifestarse de diversas formas y llevarnos por un camino de autodestrucción espiritual. Continúa leyendo este artñiculo para conocer cuales son los pasos que…
El cielo es la Plenitud de la comunión con Dios
Aprendamos un poco más sobre la comunión con Dios y cómo nos ayuda a mejorar nuestra vida y, al mismo tiempo, ayuda a mejorar la vida de los demás, porque…
Jacinta Marto, la pastorcita que nos enseña el valor del sacrificio
El 20 de febrero se cumplió el centésimo aniversario de la muerte de Santa Jacinta Marto, la pastorcilla de Fátima fallecida en Lisboa con sólo diez años. Todos conocemos la …