El pasado 6 de abril se aprobó en el Senado de España la proposición de Ley que criminaliza a los provida que se acerquen a centros abortistas y realicen «mediante actos molestos, ofensivos» algo para «obstaculizar el ejercicio del derecho a la interrupción voluntaria del embarazo». Esta norma permite multas y entre 3 y 12 meses de cárcel, y que el denunciante sea cualquiera, incluyendo los empleados de clínicas abortistas (ni siquiera se requiere que sea la embarazada que supuestamente pudiera sentirse molesta). La ley en el Senado obtuvo 154 votos a favor (de la izquierda, nacionalistas y Ciudadanos) y 105 en contra (del PP, Vox y UPN).
NEOS, una plataforma de asociaciones en defensa de «la vida, la familia y la libertad» ha protestado ante esta ley, que considera parte de “la deriva legislativa del Gobierno que pone en entredicho derechos fundamentales como son la libertad ideológica y de conciencia, el de reunión, el de manifestación y el de expresión”.
Ante las multas que se quieren aplicar a quienes rezan en esas clínicas, Neos señala que “el hecho religioso no es un problema social y considera que un Estado verdaderamente democrático debe reconocerlo, acogerlo y respetarlo desde una laicidad positiva, que poco tiene que ver con el laicismo excluyente”.
Mayor Oreja: «a rezar ante abortorios le llaman arteramente acoso»
Jaime Mayor Oreja, antiguo político del PP, miembro de la plataforma europea provida One of Us e impulsor de NEOS, asegura en la nota que “algo falla en una sociedad en la que matar a un ser humano que va a nacer es un derecho y, sin embargo, a rezar ante los abortorios se le llama arteramente acoso para convertirlo en un delito”.
(Además, los delitos de acosos y coacciones ya existían en el ordenamiento español, pero no servían para multar a los provida porque rezar o manifestarse en la calle no es acoso ni coacción).
María San Gil, otra ex-política del PP impulsora de NEOS, protestó señalando que «lo que está verdaderamente en cuestión es si le damos el derecho a una mujer, que ya es madre, de acabar con la vida de su propio hijo”.
Desde E-Cristians, otra de las asociaciones de Neos, Josep Miró, otro ex-político que hace muchos años fue portavoz de Convergència en el Ayuntamiento de Barcelona, aseguró que “la modificación del Código Penal para perseguir a las personas que se encuentren en los entornos de las clínicas abortistas solo intenta atemorizar a las personas provida e infundir miedo”. Cree que esta norma muy probablemente es anticonstitucional.
Miró denuncia que con leyes así España va camino de convertirse “en un estado policial fucsia con disfraz liberal”. Anima “a decir basta ante tanta arbitrariedad y a luchar unidos en defensa de los derechos fundamentales”.
Presentación de Neos a principios de 2022, con el lema «Porque no todo vale».
Defender la vida de todos
La nota de Neos anima a apoyar a los provida, porque se dedican «a defender la vida de todos, también la de los más débiles: aquellos que van a nacer y no cuentan con voz ni voto”.
En ese sentido, Luis Peral, responsable del grupo de trabajo de Neos centrado en la defensa de la Libertad, manifestó que “la labor que realizan, entre otros, los rescatadores es encomiable, no solo rezando ante las clínicas e informando con verdad y salvando vidas, también acompañando a todas esas mujeres que tras haber abortado se encuentran solas y sin ningún seguimiento posterior por parte de quienes se lucran practicando los abortos”.
Según Peral, “el Gobierno parece ignorar cuestiones como la realidad del síndrome post-aborto, el acoso laboral por embarazo o maternidad que sufren tantas mujeres o los métodos que se utilizan para interrumpir el embarazo en gestaciones avanzadas, los cuales producen un sufrimiento fetal incompatible con la prohibición de la tortura y de los tratos inhumanos y degradantes recogidas en los tratados internacionales sobre Derechos Humanos”.
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