Autor:
Bogotá – “Un paso ineludible es recrear la voluntad de ser nación y de construir la unidad en medio de la diversidad, entre los diferentes sectores, a través de un esfuerzo creativo” reiteran los obispos colombianos, poniendo de manifiesto la necesidad de “un proyecto común que incluya a todos, especialmente a los más desprotegidos, en una cultura del encuentro y la amistad social”. “Esta llamada a la unidad de la nación no florecerá sin un serio y permanente compromiso por la paz y el respeto por la vida. ¡Basta ya de toda guerra! Caminemos juntos para erradicar cualquier expresión de odio y violencia, que no solo nos empobrecen materialmente, sino que también nos deshumanizan y aniquilan espiritualmente. Necesitamos una nueva apertura al diálogo que debe ser productivo, como instrumento de construcción y de consolidación en pro de una democracia incluyente…