En un decreto publicado el pasado 18 de diciembre, el Papa Francisco proclamó santas a las 16 monjas carmelitas descalzas ejecutadas por la guillotina durante la Revolución Francesa. La Iglesia no utilizó el proceso habitual para la creación de un santo, sino por «canonización equivalente.» Este proceso reconoce la antigua veneración de los mártires. El Papa Francisco aprobó incluir en el canon de los santos a la beata Teresa de San Agustín y a 15 Carmelitas Descalzas de Compiègne martirizadas durante el Reinado del Terror francés. Dos años después de que el gobierno revolucionario francés ilegalizara la vida religiosa en 1790, la comunidad de carmelitas descalzas de Compiègne se vio obligada a abandonar su monasterio. En 1794, se descubre que seguían viviendo en comunidad como consagradas. Fueron juzgadas y ejecutadas públicamente en la guillotina el 17 de julio…… Continuar leyendo
Autor: Jorge López Teulón
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